La secretaria confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo de CCOO, Carolina Vidal, y el secretario general de CCOO, Unai Sordo, han presentado en rueda de prensa el documento "100 medidas para un Pacto integral y estatal de Cuidados”.
Unai Sordo ha comenzado aludiendo a la propuesta presentada por el sindicato en 2023 de un Pacto estatal e integral de los cuidados, "que hoy queremos detallar con estas más de 100 propuestas que presentamos, sobre las que debería pivotar ese gran pacto”.
Para CCOO los cuidados son un asunto estratégico, y se trata, según ha señalado Sordo, "de situar un pilar del Estado de bienestar que quedó pendiente en el gran pacto social establecido tras la segunda guerra mundial”. En la reconstrucción que se produjo tras los desastres de la guerra, se implementaron sistemas públicos de sanidad, enseñanza, pensiones, protección por desempleo e incluso incipientes medidas de protección de rentas, pero el tema de los cuidados quedó al margen, derivándose al ámbito privado, familiar, y fueron las mujeres las que se encargaron de ellos.
"Hoy hay que buscar otra manera de articular esto”, ha advertido el secretario general de CCO, ya que "la actividad de cuidados no debe seguir siendo sinónimo de precariedad, bajos salarios, baja consideración social y fuertemente feminizada”.
Sordo ha repasado los efectos que la actividad de cuidados tiene sobre las mujeres, reflejadas en las cifras de inactividad, de parcialidad no deseada, en el abrumador porcentaje de mujeres que cogen excedencias por cuidados, y en cómo la maternidad penaliza las carreras profesionales de las mujeres al provocar carreras profesionales discontinuas que explican las brechas salariales.
Los cuidados son un asunto público, no privado ni de las mujeres
Pero además de afectar a las mujeres, la sociedad entera sufre las consecuencias de los déficits de cuidados en lo que respecta a la atención a la infancia, a las personas con discapacidad o a las que se encuentran en situación de dependencia.
Y para abordar eso son necesarios compromisos reales y dotación presupuestaria; "de ahí, ha remarcado Unai Sordo, la importancia de la política fiscal, de una reforma fiscal justa, suficiente y progresiva, que genere recursos para hacer realidad estas propuestas.”
Carolina Vidal, por su parte, ha recordado que "CCOO llevamos tiempo poniendo en la agenda pública la urgencia de transformar el modelo de cuidados”. En su opinión, la transformación del modelo de cuidados es necesaria para frenar discriminaciones y para afrontar retos presentes y futuros, pues comporta redistribuir responsabilidades de cuidados, dignificar los trabajos de cuidados y articular un sistema público integral de cuidados de calidad.
"No partimos de cero, ha señalado Vidal; tenemos un Estado del Bienestar cimentado pero este modelo muestra efectos injustos, está incompleto en su articulación, y es insuficiente de cara a desafíos presentes y, sobre todo, futuros”.
Porque quienes cuidan mayoritariamente, de manera remunerada o no, son las mujeres
El trabajo de cuidar adjudicado culturalmente a las mujeres es el factor estructural sobre el que se sustentan persistentes desigualdades que se agravan cuando concurren otras situaciones o circunstancias personales, sociales o territoriales. "Y este factor estructural sigue generando discriminaciones a las mujeres” ha recordado Carolina Vidal. "Supone además una impugnación de facto de un principio fundamental en el que se asienta la democracia: el principio constitucional de la igualdad, que es el derecho de todos los seres humanos a ser iguales en dignidad, a ser tratados con respeto y consideración y a participar sobre bases iguales en cualquier área de la vida económica, social, política, cultural o civil.
106 medidas
Estas medidas que hoy se presentan son el resultado de un trabajo interno desarrollado por el Grupo confederal de Cuidados "que ha analizado, detectado, formulado y contrastado cómo las líneas estratégicas que planteamos en nuestra Propuesta de Pacto integral y estatal de Cuidados pueden materializarse en medidas concretas que afectan directamente a los derechos y a las condiciones de vida tanto de quienes necesitan cuidados como de quienes cuidan profesionalmente”.
Con las 106 medidas "se aporta una batería de propuestas que pretenden dar respuesta a necesidades detectadas desde distintos ángulos, pero con el denominador común de aterrizar con soluciones a problemáticas variadas y complementarias, necesarias para un cambio de modelo que necesitamos, que son factibles y que significarían mejoras sustanciales en materia laboral, de derechos de las personas y de servicios públicos”.
Las medidas están agrupadas en varios epígrafes:
Con carácter general
Elaboración de una Ley de Cuidados, con financiación suficiente y finalista; reducción de la jornada laboral sin reducción de salario a 37,5 h; o la consideración de los servicios sociales públicos y todos los servicios de cuidados como servicios esenciales.
En relación al derecho a recibir cuidados profesionales
En la infancia, empezando por garantizar desde el Estado y las CCAA la universalidad de los servicios de educación infantil de 0-3 años.
En los cuidados larga duración, ampliando significativamente la oferta de recursos y plazas, creando residencias y viviendas públicas con servicios y equipos multidisciplinares, alternativas de convivencia y habitacionales asistidas, entre otros
En relación a los derechos laborales de las personas que cuidan
Equiparación de las condiciones laborales y salariales de las personas trabajadoras de los sectores de cuidados al personal homólogo del servicio público correspondiente, incrementando las ratios de plantilla para la cobertura asistencial. Se estima que se necesita incrementar las plantillas de residencias públicas y privadas de un 50 a un 60%; en ayuda a domicilio incrementar de forma sensible los contratos a tiempo completo, para situarlos por encima del 70%.
Priorizar los servicios profesionales de cuidados de titularidad y gestión pública directa.
Garantizar por ley que las plataformas digitales que ofertan profesionales de cuidado y atención domiciliaria cumplen con las condiciones laborales y salariales de los convenios colectivos sectoriales de cuidado convencionales de referencia.
En relación a una Conciliación Corresponsable
Ampliar el permiso de nacimiento como derecho individual, igual e intransferible para ambos progenitores a 20 semanas en el marco del Diálogo Social
Modificar la normativa a fin de garantizar que el permiso parental de 8 semanas hasta que el/la menor tenga 8 años, sea retribuido en su totalidad.
En relación a acabar con la segregación de género y crear empleos cualificados en los sectores de cuidados
Establecer estrategias para eliminar la segregación por género en las ocupaciones de cuidados, de forma que se contribuya a desfeminizar los cuidados, tanto en el ámbito de los estudios como de la formación para el empleo.
Este nuevo modelo, en base a políticas de cuidados transformadoras que se sustenten sobre los cuidados profesionalizados, precisa de la creación de empleo de calidad. Para su concreción CCOO reclama participación en los escenarios de diálogo social correspondientes (estatal, autonómicos -dado el marco competencial en estos sectores- y sectoriales).
En definitiva, subraya Carolina Vidal, "con estas 100 medidas para un Pacto Estatal e integral de cuidados ponemos sobre la Mesa medidas realistas, factibles y esenciales para una sociedad democrática más justa, corresponsable y con más igualdad”.
Documentación asociada:
100 medidas para un Pacto Integral y Estatal de Cuidados
100 medidas para un Pacto Integral y Estatal de Cuidados
Fuente de la noticia: Sindicato CCOO
Unai Sordo ha comenzado aludiendo a la propuesta presentada por el sindicato en 2023 de un Pacto estatal e integral de los cuidados, "que hoy queremos detallar con estas más de 100 propuestas que presentamos, sobre las que debería pivotar ese gran pacto”.
Para CCOO los cuidados son un asunto estratégico, y se trata, según ha señalado Sordo, "de situar un pilar del Estado de bienestar que quedó pendiente en el gran pacto social establecido tras la segunda guerra mundial”. En la reconstrucción que se produjo tras los desastres de la guerra, se implementaron sistemas públicos de sanidad, enseñanza, pensiones, protección por desempleo e incluso incipientes medidas de protección de rentas, pero el tema de los cuidados quedó al margen, derivándose al ámbito privado, familiar, y fueron las mujeres las que se encargaron de ellos.
"Hoy hay que buscar otra manera de articular esto”, ha advertido el secretario general de CCO, ya que "la actividad de cuidados no debe seguir siendo sinónimo de precariedad, bajos salarios, baja consideración social y fuertemente feminizada”.
Sordo ha repasado los efectos que la actividad de cuidados tiene sobre las mujeres, reflejadas en las cifras de inactividad, de parcialidad no deseada, en el abrumador porcentaje de mujeres que cogen excedencias por cuidados, y en cómo la maternidad penaliza las carreras profesionales de las mujeres al provocar carreras profesionales discontinuas que explican las brechas salariales.
Los cuidados son un asunto público, no privado ni de las mujeres
Pero además de afectar a las mujeres, la sociedad entera sufre las consecuencias de los déficits de cuidados en lo que respecta a la atención a la infancia, a las personas con discapacidad o a las que se encuentran en situación de dependencia.
Y para abordar eso son necesarios compromisos reales y dotación presupuestaria; "de ahí, ha remarcado Unai Sordo, la importancia de la política fiscal, de una reforma fiscal justa, suficiente y progresiva, que genere recursos para hacer realidad estas propuestas.”
Carolina Vidal, por su parte, ha recordado que "CCOO llevamos tiempo poniendo en la agenda pública la urgencia de transformar el modelo de cuidados”. En su opinión, la transformación del modelo de cuidados es necesaria para frenar discriminaciones y para afrontar retos presentes y futuros, pues comporta redistribuir responsabilidades de cuidados, dignificar los trabajos de cuidados y articular un sistema público integral de cuidados de calidad.
"No partimos de cero, ha señalado Vidal; tenemos un Estado del Bienestar cimentado pero este modelo muestra efectos injustos, está incompleto en su articulación, y es insuficiente de cara a desafíos presentes y, sobre todo, futuros”.
Porque quienes cuidan mayoritariamente, de manera remunerada o no, son las mujeres
El trabajo de cuidar adjudicado culturalmente a las mujeres es el factor estructural sobre el que se sustentan persistentes desigualdades que se agravan cuando concurren otras situaciones o circunstancias personales, sociales o territoriales. "Y este factor estructural sigue generando discriminaciones a las mujeres” ha recordado Carolina Vidal. "Supone además una impugnación de facto de un principio fundamental en el que se asienta la democracia: el principio constitucional de la igualdad, que es el derecho de todos los seres humanos a ser iguales en dignidad, a ser tratados con respeto y consideración y a participar sobre bases iguales en cualquier área de la vida económica, social, política, cultural o civil.
106 medidas
Estas medidas que hoy se presentan son el resultado de un trabajo interno desarrollado por el Grupo confederal de Cuidados "que ha analizado, detectado, formulado y contrastado cómo las líneas estratégicas que planteamos en nuestra Propuesta de Pacto integral y estatal de Cuidados pueden materializarse en medidas concretas que afectan directamente a los derechos y a las condiciones de vida tanto de quienes necesitan cuidados como de quienes cuidan profesionalmente”.
Con las 106 medidas "se aporta una batería de propuestas que pretenden dar respuesta a necesidades detectadas desde distintos ángulos, pero con el denominador común de aterrizar con soluciones a problemáticas variadas y complementarias, necesarias para un cambio de modelo que necesitamos, que son factibles y que significarían mejoras sustanciales en materia laboral, de derechos de las personas y de servicios públicos”.
Las medidas están agrupadas en varios epígrafes:
Con carácter general
Elaboración de una Ley de Cuidados, con financiación suficiente y finalista; reducción de la jornada laboral sin reducción de salario a 37,5 h; o la consideración de los servicios sociales públicos y todos los servicios de cuidados como servicios esenciales.
En relación al derecho a recibir cuidados profesionales
En la infancia, empezando por garantizar desde el Estado y las CCAA la universalidad de los servicios de educación infantil de 0-3 años.
En los cuidados larga duración, ampliando significativamente la oferta de recursos y plazas, creando residencias y viviendas públicas con servicios y equipos multidisciplinares, alternativas de convivencia y habitacionales asistidas, entre otros
En relación a los derechos laborales de las personas que cuidan
Equiparación de las condiciones laborales y salariales de las personas trabajadoras de los sectores de cuidados al personal homólogo del servicio público correspondiente, incrementando las ratios de plantilla para la cobertura asistencial. Se estima que se necesita incrementar las plantillas de residencias públicas y privadas de un 50 a un 60%; en ayuda a domicilio incrementar de forma sensible los contratos a tiempo completo, para situarlos por encima del 70%.
Priorizar los servicios profesionales de cuidados de titularidad y gestión pública directa.
Garantizar por ley que las plataformas digitales que ofertan profesionales de cuidado y atención domiciliaria cumplen con las condiciones laborales y salariales de los convenios colectivos sectoriales de cuidado convencionales de referencia.
En relación a una Conciliación Corresponsable
Ampliar el permiso de nacimiento como derecho individual, igual e intransferible para ambos progenitores a 20 semanas en el marco del Diálogo Social
Modificar la normativa a fin de garantizar que el permiso parental de 8 semanas hasta que el/la menor tenga 8 años, sea retribuido en su totalidad.
En relación a acabar con la segregación de género y crear empleos cualificados en los sectores de cuidados
Establecer estrategias para eliminar la segregación por género en las ocupaciones de cuidados, de forma que se contribuya a desfeminizar los cuidados, tanto en el ámbito de los estudios como de la formación para el empleo.
Este nuevo modelo, en base a políticas de cuidados transformadoras que se sustenten sobre los cuidados profesionalizados, precisa de la creación de empleo de calidad. Para su concreción CCOO reclama participación en los escenarios de diálogo social correspondientes (estatal, autonómicos -dado el marco competencial en estos sectores- y sectoriales).
En definitiva, subraya Carolina Vidal, "con estas 100 medidas para un Pacto Estatal e integral de cuidados ponemos sobre la Mesa medidas realistas, factibles y esenciales para una sociedad democrática más justa, corresponsable y con más igualdad”.
Documentación asociada:
100 medidas para un Pacto Integral y Estatal de Cuidados
100 medidas para un Pacto Integral y Estatal de Cuidados
Fuente de la noticia: Sindicato CCOO