La unidad de columna del servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Reina Sofía ha obtenido el premio a la mejor comunicación en formato cartel en el 61 congreso nacional de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatológica que se ha celebrado recientemente en Granada. En el encuentro se han presentado más de 500 comunicaciones de entre las que la propuesta cordobesa ha sido la galardonada.
El estudio ha sido realizado por la unidad de columna en colaboración con Neurofisiología Clínica. Concretamente en la comunicación se exponen los resultados del análisis que han realizado sobre una muestra de 11 pacientes relacionado con el comportamiento neurofisiológico de 200 instrumentaciones PEEK-carbono. Se trata de un tipo de tornillos que se emplean en pacientes con patología tumoral vertebral porque mejoran la imagen y, sobre todo, la precisión en la radioterapia postoperatoria.
Y aunque aportan ventajas, no hay estudios que analicen la conductividad y los límites de seguridad en la estimulación neurofisiológica de su uso, de ahí el interés científico de esta propuesta. Según destaca el responsable de la unidad de columna que también es uno de los autores del estudio, Simón Fuentes, “gracias a este trabajo hemos establecido la imposibilidad de determinar rangos de seguridad en la electroestimulación para estos implantes debido a las características del material (el material posee propiedades físicas distintas según la dirección en que se mide)”.
Esto implica que la medición de la determinación de la seguridad cuando usamos este instrumental deba de realizarse previamente sobre implantes de titanio para garantizar la no afectación de la médula. El equipo del hospital utiliza este material desde hace tres años en pacientes con patología tumoral vertebral (con compresión medular) para mejorar el seguimiento clínico y el tratamiento radioterápico. A lo largo del año, la unidad de columna realiza más de 20 intervenciones de este tipo, siendo previamente estudiados y seleccionados en la subcomisión de metástasis vertebrales, donde cada caso se analiza de manera personalizada.
Fuente de la noticia: Servicio Andaluz de Salud (SAS)
El estudio ha sido realizado por la unidad de columna en colaboración con Neurofisiología Clínica. Concretamente en la comunicación se exponen los resultados del análisis que han realizado sobre una muestra de 11 pacientes relacionado con el comportamiento neurofisiológico de 200 instrumentaciones PEEK-carbono. Se trata de un tipo de tornillos que se emplean en pacientes con patología tumoral vertebral porque mejoran la imagen y, sobre todo, la precisión en la radioterapia postoperatoria.
Y aunque aportan ventajas, no hay estudios que analicen la conductividad y los límites de seguridad en la estimulación neurofisiológica de su uso, de ahí el interés científico de esta propuesta. Según destaca el responsable de la unidad de columna que también es uno de los autores del estudio, Simón Fuentes, “gracias a este trabajo hemos establecido la imposibilidad de determinar rangos de seguridad en la electroestimulación para estos implantes debido a las características del material (el material posee propiedades físicas distintas según la dirección en que se mide)”.
Esto implica que la medición de la determinación de la seguridad cuando usamos este instrumental deba de realizarse previamente sobre implantes de titanio para garantizar la no afectación de la médula. El equipo del hospital utiliza este material desde hace tres años en pacientes con patología tumoral vertebral (con compresión medular) para mejorar el seguimiento clínico y el tratamiento radioterápico. A lo largo del año, la unidad de columna realiza más de 20 intervenciones de este tipo, siendo previamente estudiados y seleccionados en la subcomisión de metástasis vertebrales, donde cada caso se analiza de manera personalizada.
Fuente de la noticia: Servicio Andaluz de Salud (SAS)